Descripción
Los ojos de seguridad (par) son perfectos para completar tu amigurumi. Son con un diseño básico, en color negro, redondos y ligeramente levantados para que resalten un poco sobre el tejido.
Están fabricados en plástico y se componen de dos piezas diferentes. Por un lado, la que se ve y hace de ojito que tiene una parte redonda y un pequeño “pincho” que va atravesando el tejido. Ese “pincho” tiene unas muescas donde después se enganchará la segunda pieza. Ésta es de plástico también con forma redonda y un pequeño agujero central. Se introduce por el pincho y se queda enganchada en la muesca hasta la que la lleves. Una vez colocada, es imposible sacarla de ahí. Por eso, se llaman ojos de seguridad.
Puedes elegir diferentes tamaños, según el tamaño del amigurumi que hayas tejido o también de la expresión que quieras darle a su carita. Los más habituales son los de 6 u 8mm, pero es cuestión de que tú midas tu muñeco y elijas el que mejor se adapte a tus necesidades.
Los ojos se colocan antes de terminar la cabeza del muñeco, necesitas que esté hueca para poder ponerle la pieza que hace de ojo por delante y la pieza que hace de tope por detrás, por dentro de la cabecita. Así que, necesitarás tener los ojos, antes o durante el tejido de tu amigurumi. Sin ellos, no podrás terminarlo.
Si vas a regarlo a un niño muy pequeño y no te fías del todo de los ojos de seguridad (par), siempre tienes la opción de bordarlos con hilo negro. Un poco más de trabajo, pero también pueden quedar ideales.
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